LAS COSAS MÁS SENCILLAS

Las cosas más simples, como el sonido de tus pasos saliendo hacia la puerta; saber que estás ahí, de pie, esperando por mí con tu cara iluminada.

Hacer café y planear la huída, la caminata de los locos felices, mirarte así, fumarme ese aroma de hombre mientras tú tomas de la taza y miras

Y te preocupas tanto por mí que casi me provocas lanzarte un par de besos.

Para mí lo pequeño, lo banal, me hace tocar el cielo con las manos todo eso que la gente tira y olvida y deja empolvarse por años en un rincón y más tarde los hace preguntarse qué rayos salió mal y ya es muy tarde, lo escucho y no lo entiendo

Me guardo el instante, el paso de los dedos por la cara y el beso, esas cosquillitas en el estómago, hacen que espere la vuelta.

Cada ves que escucho pasos que se acercan a la puerta, porque quizás lo que más extraño es esa sonrisita de luz cuando abro y escucho mi nombre y entonces todo tiene sentido una vez más, la mágica escalada de lo etéreo hacia lo otro, en un simple cuarto con fondo de cama que nos sonríe y nos aguarda calladita e impasible mientras avanzas hacia mí con tu lenguaje de arroyo y arrullos, inhalando los sonidos de todo.

Y la palabra mágica y sencilla

Te amo

Me despido por unos días

dejando mi agradecimiento

 un abrazote enormeeeeeeeee

un besote

y

una flor