Atrevido misterio
que susurras a mi oído
el rastro de la sombra
y el abandono del olvido
desgracia de las horas
cubiertas de tristeza
que lloran la locura
del espacio en el reloj
fragmento de recuerdos
cayendo como un diluvio
en mi pecho malherido
de indiferencia en el camino
y una utopía en la distancia
que demora por tus besos
aquellos que en tu ausencia
dejaron de vivir
las calles silenciosas
las noches atrevidas
se ciñen a mi paso
sollozando de melancolía
mi cobarde angustia
se encuentra en sintonía
con el rincón lejano
de un carente corazón
que llora la desidia
absoluta y desmedida
que me dejó tu olvido
abandonando la razón!
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